lunes, 12 de octubre de 2015

Carlos Fuentes. Reseña literaria

Carlos Fuentes (Carlos Fuentes Macías, 11-11-1925, 15-05-2012) fue un escritor, intelectual y diplomático mexicano, nacido en Panamá debido a la actividad diplomática de su padre. Su infancia transcurrió en suelo panameño, y vivió en Quito (Ecuador), Montevideo (Uruguay), Río de Janeiro (Brasil), Washington (Estados Unidos), Santiago (Chile), y Buenos Aires (Argentina). Pasó su adolescencia en México, cursó estudios en Suiza y Estados Unidos, y se recibió de Abogado en la Universidad Autónoma de México (UNAM). Publicó sus primeros escritos en revistas mexicanas, colaborando en diarios y suplementos culturales y periódicos de México y de otros países. Fue embajador de México en Francia y profesor en las universidades de Columbia, Harvard, Princeton, Brown y Pennsylvania. Integró el grupo de escritores del llamado "Boom hispanoamericano" que reunía entre otros a Julio Cortázar y García Márquez, de quién era un amigo entrañable. Su obra literaria es vasta y muy importante. Su primera novela fue: La región mas transparente, y su último libro, titulado Carolina Grau, se trata de nueve cuentos publicados en 2010. Escribió veinticinco novelas, treinta libros de relatos y cuentos, varios ensayos y obras de teatro. Su novela Gringo Viejo fue llevada al cine, arte por el cual Carlos Fuentes profesaba un profundo amor, como lo manifiesta en su libro Pantallas de plata. Recibió treinta premios, entre los que se destacan el Premio Xavier Villarrubia, el Rómulo Gallegos, Premio Alfonso Reyes, Premio de Literatura de México, Premio Cervantes, Premio Menéndez Pelayo, Premio Príncipe de Asturias, Premio Real Academia Española. Recibió la Orden de la Legión de Honor de Francia. Leer la obra de Carlos Fuentes significa disfrutar de su inigualable prosa, de su intelecto, de su aporte fantástico a la literatura en lengua española. No es posible entender cómo no fue premiado con el Nobel de Literatura para el que siempre estuvo nominado. Al respecto dijo Carlos Fuentes: "Cuando le dieron el Premio Nobel a García Márquez (1982) me lo dieron a mi, a mi generación, a la novela latinoamericana que nosotros representamos en un momento dado. De manera que yo me doy por premiado". Estas palabras demuestran la grandeza de este irrepetible escritor que merecía también esa distinción.