sábado, 1 de agosto de 2009

RECORDANDO A JOSE DONOSO

La sala se llenó antes de la hora indicada por la Editorial para el comienzo de la presentación del libro, con la presencia del escritor renombrado.

Era las nueve, algo menos, de una noche otoñal, y en la calle pasaba un viento fresco y constante, característico de Montevideo.

Adentro del auditorio, el clima era cálido y los invitados, al par que se acomodaban en las butacas, miraban a los lados para descubrir por donde iba a ingresar el escritor chileno.

Adelante, junto a la mesa arreglada para la ocasión, los organizadores se aseguraban de que todo estuviera pronto, y los técnicos en amplificación terminaban de probar el micrófono.

Consultas, idas y venidas de aquellos, hasta que de pronto, entre un grupo de cuatro o cinco personas, entró por el pasillo caminando a pasos largos, vestido de azul, el escritor José Donoso.

Antes de llegar a la mesa y de sentarse acodado a la misma, recibió un aplauso prolongado de parte de los asistentes puestos de pie.

El levantó la vista a su frente, con el aire entre reflexivo y ensimismado de los hombres que piensan; se acomodó en el asiento y esperó que el presentador terminara una reseña breve de su trayectoria y obra, y le reiterara la bienvenida con palabras de aprecio.

Entonces, comenzó a hablar sobre sus libros, deteniéndose más en: "El obsceno pájaro de la noche", quizá para que los presentes descubrieran por sí mismos su libro nuevo: "Donde van a morir los elefantes".

Yo observé a aquel hombre enjuto, de barba rubia y cabellera espesa y cuidada. Escuchaba su voz de timbre agudo, y me convencí de que el escritor se siente mejor escribiendo que hablando.

Cuando llegó el momento de los autógrafos, y a mi turno, abrí el libro flamante en la segunda hoja en blanco, y le alcancé un bolígrafo. El firmó y puso la fecha, me devolvió el lápiz, y solo tuve tiempo de agradecerle porque la hilera de gentes era larga.

Salí a la calle ventosa con un brazo extendido junto al cuerpo y el libro asido por el lomo; ese mismo que veo en el estante, ahora, y el bolígrafo también está allí, sobre el borde de la madera barnizada.

lunes, 27 de julio de 2009

Esperando Libros

"...Encuentro lo que no busco..." A.Machado. Proverbios y Cantares.
Todos los meses voy a las librerías. Converso menos que unos años pasados, con los amigos que me reciben contentos como yo, quizá porque nos parece que disponemos de menos tiempo para ello, y eso sea verdad, o no.
Miro los estantes llenos de libros, aunque no están los que procuro. Existen textos de auto ayuda -muchos - y los que refieren a épocas pasadas de este lugar, que tampoco me interesan:..." hoy dista mucho de ayer. Ayer es nunca jamás..." A. Machado.
Procuro algunas obras del galardonado escritor Sergio Pitol, nacido en Puebla (México) y me dicen que aquí nunca han llegado.
Busco un libro específico del escritor argentino Abelardo Castillo, y no hay.
-Nunca lo oí nombrar - me contestó un librero que lleva treinta años trabajando en ese ramo. -Dígame el titulo de algunas de las obras de ese escritor, -agregó- viendo mi expresión de extrañeza.
No hallo un libro de Héctor Tizón, el escritor argentino nacido y radicado en Yala (Jujuy-Argentina).
Hay mucha oferta de libros de autoayuda, y de guerras y revueltas. Yo quiero leer los cuentos excelentes de esos escritores. Entonces, debí encargarlos en el exterior : España, México, Estados Unidos, y hasta en Brasil.
Hace dos meses que estoy a la espera de los libros de Sergio Pitol. El distribuidor no los ha enviado todavía, me avisan de la librería europea.
Yo sigo a la espera. "...El que espera desespera, dice la voz popular..."A. Machado.
No tengo otra alternativa sino la de esperar.

domingo, 10 de mayo de 2009

ESCRIBIENDO

Trabajo a diario en la escritura de tres cuentos; un poco de tiempo para cada tema, y el tiempo parece no alcanzarme.
Hace un par de meses algo más, que los escribo y corrijo, sin haber avanzado aún hacia la finalización de alguno de esos temas.
Cada vez que retomo la escritura y los releo, encuentro algo para recortar, arreglar o cambiar.
Este género literario -el cuento breve- no es algo fácil para los escritores, y me gusta.
Algunos cuentos son de media cuartilla, otros llegan a diez, y la mayoría son de dos o tres, solamente.
Si este blog a veces no avanza como debería, es porque estoy escribiendo, a la manera de Camilo José Cela, es decir, de puño y letra, con papel, lápiz, y alguna goma cercana que poco uso, por la costumbre de hacer tachaduras.
Al decir de Antonio Machado:..."romero, para ir a Roma, lo importante es caminar...". Así lo hacemos.

jueves, 7 de mayo de 2009

SOLEMNIDADES

..."yo se que el necio se entierra,
con gran lujo y con gran llanto"...
José Martí. Versos sencillos.

Leyendo -por ventura- una obra del excelente escritor español Ignacio Aldecoa, supe que no le gustaban las solemnidades, las cosas hechas con solemnidad, las cosas solemnes.
A mi tampoco me gustan, nunca me han gustado.
José Ingenieros, escritor argentino, autor de "Las fuerzas morales", entre otras obras, remarcaba que todo hombre mediocre es solemne. Nada tiene valor para éste, si no se hace con solemnidad, lejos de la simplificación.

..."Sencilla, haz una cruz sencilla, carpintero"...escribió el poeta español León Felipe en sus "Versos y oraciones de caminante".

La sencillez no es algo que le sirva a la mediocracia, que la confunde con simpleza, llanura, y gusta del vuelo, de los ornamentos.
La sencillez sería,por lo tanto, algo opuesto, es decir, inherente a los hombres de cultura elevada.
De tal colección de en narrativa, me gustaron: el libro del español Ignacio Aldecoa, y del escritor argentino nacido y residente en Yala(provincia de Jujuy) Héctor Tizón; bastante de la obra de Augusto Monterroso, y como dice el título de un libro de éste escritor: lo demás es silencio.

Antonio Machado, en cuya obra está todo lo que se necesita para aprender y entender nuestro idioma castellano, en una de sus poesías escribió:
..."Prefiere la rima pobre
la asonancia indefinida
cuando nada cuenta el canto
acaso huelgue la rima.

Verso libre, verso libre...
Líbrate mejor, del verso
cuando te esclavice

La rima verbal y pobre
y temporal, es la rica..."

miércoles, 6 de mayo de 2009

¿ NO HAY NADIE EN LA ACADEMIA ?

Nadie contestó aún a mi aldabada.
La di mediante el envío de un correo electrónico a la Real Academia Española (RAE).
Imagino una escena :yo, tras llamar entusiasmado y expectante afuera luego del anuncio, esperando en vano, aunque sin perder la alegría porque al final, con respeto y delicadeza, puse en conocimiento de la Institución mayor de nuestra lengua, la existencia de este blog y sus finalidades que están expresadas en una de las primeras crónicas que lo componen.
El correo fue enviado el 6 de noviembre de 2008.
Yo cumplí mi parte. Al decir de García Lorca en uno de sus romances: ..."Me porté como quién soy..." en mi caso, como un oriental legítimo, (Oriental, por ser de la República Oriental del Uruguay).
Lo de "aldabada", va por las letras del poeta español Antonio Machado, en: "La casa de Alvargonzález", parte II, titulado:"El viajero": ..."Los dos hermanos oyeron, una aldabada en la puerta..."
Alguien me dijo que quizá en la Academia no le hagan caso a los correos electrónicos.
No hago conjeturas, prefiero la realidad: el envío del correo, y el silencio del otro lado.
Comento esta situación y cada cual sacará sus conclusiones.
Yo tengo las mías.

sábado, 4 de abril de 2009

Reportajes

Cierta vez leí un artículo publicado en una revista, sobre el genial escritor argentino Jorge Luis Borges, autor entre otros libros de: El Aleph, Libro de Arena, Ficciones, Historia Universal de la Infamia.Contaban que en una ocasión, culminadas las obras en la calle donde tenía su casa, la iluminación había quedado reparada por entero. Un vecino, viéndolo al escritor, se le aproximó y le dijo: "iluminaron la avenida del poeta", y que Borges le contestó: "pusieron esas luces para que yo no orine de noche aquí en la acera", dejándolo al otro sin saber que decir, a la vez que le quitó trascendencia al asunto y a la idea de que por él se hubieran hecho las cosas. Esta capacidad de Borges para contestar con cierto humor y sencillez las cosas dichas a su respecto, se refleja también en otra anécdota: cuando lo paraban en la calle, generalmente los estudiantes, para grabarle las palabras sobre algún tema que pudiera luego ser objeto de alguna tesis, o trabajo académico, aquel les preguntaba que hora era. Cuando le respondían, ponía una cara de sorprendido y salía de la situación diciendo: "a ésta hora siempre corro" y se marchaba aprovechando la sorpresa de sus interlocutores ocasionales.

Cuando le preguntaron que entendía por "literatura comprometida", respondió: "Yo no conozco ninguna "literatura comprometida", conozco solamente buena o mala literatura, literatura comprometida no me dice nada, es lo mismo que me digan algo así como:"equitación protestante".

Algo más de Jorge Luis Borges: En una ocasión, alguien le pidió su opinión sobre Carlos Gardel. El genial escritor contesto lo siguiente: "Gardel era un paria uruguayo que cantaba tangos".

Alejandro Dolina, escritor argentino, en uno de sus libros se refiere, a través de un personaje, sobre los reportajes, y concluye que es más importante lo que se contesta, y como se contesta, que la pregunta en sí, y tiene razón.

Precisamente, sobre Dolina, vi por televisión un reportaje que le hicieron desde un programa deportivo. La joven enviada para entrevistarlo -Dolina estaba en una biblioteca amplia, llena de libros y había un escritorio, en lo que parecía ser su lugar de trabajo- utilizó todo el tiempo que duró la entrevista para preguntarle sobre un futbolista de fama(que le parecían sus conceptos, sus actitudes,etc)si tenía preferencia por tal o cual jugador, cuando en realidad el personaje era el propio escritor, y ante él, solo era necesario hacerle alguna pregunta de literatura o sobre el fútbol en si,encender el grabador,y la cámara filmadora y disfrutar de su sabiduría.

Tambièn están quienes en el curso de un reportaje, quieren hablar más que la persona a quién están reporteando. Pero este es un tema de una evidente educación deficiente, por más edad y tiempo de trabajo que tenga quién entreviste, porque conozco a personas jovenes que son talentosas, y el talento es algo que se tiene,o no. Lo más preocupante es que muchas veces, se hace un mal uso del idioma, se emplea un lenguaje chabacano, de mal gusto, cuando hablar bien nuestra lengua castellana, debería ser objeto de un aprendizaje permanente.